Educación para la Ciudadanía

A favor de "Educación para la ciudadanía"

.... En un momento en el que en España y en las sociedades occidentales quien más quien menos percibe una pérdida de valores tradicionales de respeto, de civismo y de humanismo en general a favor de una serie de valores menos positivos uno se para de repente y reflexiona sobre si somos capaces en nuestra sociedad de ser responsables con las mayores cotas de libertad que seguramente el ser humano haya podido tener en colectividad. Los que bregamos diariamente con niños en la escuela somos conscientes de las dificultades que entraña el ejercer nuestra profesión ya que vemos como tenemos que educar antes los valores mínimos de convivencia que los meramente académicos, dado que muchos de ellos no los traen aprendidos de casa. Y ante esta situación uno piensa el porqué de esta situación y en mi caso he llegado a una serie de conclusiones:

1) El proceso de socialización ha cambiado:
Normalmente habría que distinguir cuatro elementos fundamentales de socialización que históricamente han sido la familia, la escuela, la religión y el contacto con la sociedad que nos rodea. Hoy en día la familia tiene cada vez menos tiempo para atender a sus hijos, en la escuela nos las vemos y nos las deseamos para poder mantener unos mínimos criterios de convivencia que permitan la enseñanza académica en sí misma, la religión prácticamente ha desaparecido del inconsciente colectivo de los jóvenes y los medios de comunicación y las formas de juego de los chavales (videojuegos y demás) han tomado la iniciativa como elemento de socialización. La sociedad de consumo en la que vivimos ensalza los valores individuales, egoístas, competitivos y se vale de la publicidad como principal elemento de influencia, una publicidad cada vez más elaborada, mejor pensada que marca criterios de belleza, de éxito social y demás pero como hechos en sí mismo no como objetivos a alcanzar mediante el esfuerzo y la superación personal. Así, por poner un ejemplo que me toca muy de cerca, los gimnasios se llenan cada día más de chicos jóvenes que en busca del cuerpo perfecto, marcado por los criterios televisivos, están dispuestos a tomar cualquier tipo de sustancia, por muy perjudicial que sea para su salud, con tal de parecerse a tal actor o tal presentador dejando a un lado la satisfacción que les puede producir la práctica del deporte en salud en sí misma y la consecución de objetivos a largo plazo. Vivimos la cultura del momento, del lo quiero todo ahora y ya, y ante eso es difícil luchar si no somos conscientes de ello.

2) ¿Si ya sabemos qué está ocurriendo por qué no actuamos en vez de lamentarnos tanto?
Y aquí es donde entramos todos los colectivos que tenemos responsabilidades directas en la socialización de nuestros chavales aunque es deber de toda la sociedad que en mayor o menor medida actuamos como elementos socializadores en tanto que interaccionamos los unos con los otros. Debemos de ser conscientes que la colectividad es la suma de todas las individualidades que suman esa colectividad y que por tanto cualquier pequeño acto individual, aunque no lo parezca, siempre tendrá una proyección colectiva. Si somos capaces de interiorizar algo tan obvio, seremos conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor de forma racional y seremos capaces de darle la vuelta a las situaciones negativizadoras que acucian a nuestra sociedad occidental.

3) Educar en el uso responsable de la libertad
La libertad es uno de los conceptos más preciados y más mentados por el ser humano pero ¿qué es la libertad?, ¿qué es ser libre? Bajo mi punto de vista ser libre es tener la posibilidad de hacer lo que tu quieres siempre y cuando entiendas lo que quieres y lo que significa lo que quieres y porque lo quieres, es decir ser consciente de tu propia existencia y actuar en consecuencia. La libertad en sí es un concepto individualista de la existencia pero pierde esa concepción cuando topa con otras libertades y se convierte en un ejercicio de respeto a los demás, al hago lo que me apetece porque soy consciente de lo que quiero y porque lo quiero pero no molesto esa misma realidad de libertad que tiene otra persona con la que interacciono. Aclarado este punto creo fundamental enseñar a nuestros jóvenes a usar de forma responsable una libertad por la que tanta gente ha luchado en el pasado para que no se de la extraña circunstancia que en el momento histórico en el que el ser humano podría disponer de más cotas de libertad (siempre refiriéndome al primer mundo) es cuando menos y peor sabemos ejercerla y disfrutarla.

Por todo esto pienso que la asignatura Educación para la Ciudadanía puede ser un buen elemento que ayude a esta ardua tarea de contra-socialización positiva en valores de ciudadanía (entre los que incluiría el uso responsable de la libertad individual), aunque pienso que esta faena todo maestro que se haya introducido en este mundo de forma vocacional y porque precisamente cree en el significado en sí mismo de la palabra "maestro" ya la hace todos los días y a todas las horas con sus chavales; y no nos preocupemos tanto de la subjetividad, que como decía el poeta José Bergamín "si yo fuera objeto, sería objetivo pero como soy sujeto, soy subjetivo" ...